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Lore

Al principio de todo, cuando no existía un plano, tiempo o espacio. Solo había silencio, ausencia de un algo. El todo y la nada eran inherentes y el arriba y el abajo no eran diferenciables. Vacío, sin frío o calor, sin una sola pizca de materia…

En los sin fines de el vacío, un punto sin color del cual no emanaba sonido, calor o algún movimiento, reposaba en lo que no se sabe si era la esquina, el centro, el interior o el exterior del no-lugar.

Era una figura mono dimensional estática en la nada, que quién sabe cuanto transcurso de su existencia habría recorrido, solo posaba y se mantenía en su eje imaginario.

Probablemente, en una realidad sin caos, sin probabilidades y sin pasado, presente o futuro, esta pizca de materia se habría mantenido inmóvil por el siguiente micro segundo o por eones, lo cual es difícil de diferenciar, debido a la carencia del tiempo como dimensión. Sin embargo, la ley de causalidad y la ley de Murphy en nuestra realidad nos han expresado que todo tiene causa y efecto, y que, si algo tiene probabilidades de ocurrir, ocurrirá.

 

Prologo: El génesis.

 

Cuando la nada se posa tan tranquilamente, el caos es ausente. El caos, no siendo existencia si no producto de la realidad, sentía envidia de la paz. Esa paz que abrazaba sin cuidado o preocupación a la pizca de existencia en esa nada.

El caos, codicioso y deseoso de influenciar la única forma de realidad a sus ojos, no pudo evitar sentirse atraído por la idea que se mantenía en el circuito de sus pensamientos. Sin dejarse resistir, sin sentir culpabilidad, con la mayor muestra de interés y deseo en sus ojos, el caos se acercaba lenta y rápidamente, amenazando y apuntando a el único protegido de la paz.

En una fracción de segundo, el caos queriendo hacer uso de toda su influencia, intentó sacudir a la pizca de realidad, quiso crear la mínima existencia de incertidumbre para así darle espacio a la probabilidad.

La paz, viéndose amenazada por su contra parte, quiso oponer resistencia, queriendo evitar que su fragmento de perfección no fuese alterado por el factor externo que era el caos. Sin embargo, al ser ambas formas de existencia equivalentes, no podía hacer otra cosa que tener una batalla como iguales.

El resultado para la paz era obvio, a pesar de tener un control en la existencia equivalente al del caos, su influencia era anulada por la del caos y viceversa. El caos tomando la oportunidad de la batalla, logró incrementar su influencia más y más sobre la pizca de existencia, haciendo que la paz perdiera su dominio en la balanza, llevándolo así a ser un cincuenta porciento de influencia por cada parte.

El caos, viéndose con su influencia fijada en la pizca de existencia, no hizo más que posar una sonrisa leve, oscura y sin forma en su cara. El caos ya había logrado alcanzar su deseo inicial, el cual era influenciar a la mínima existencia del lugar.

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No se sabe cuanto tiempo pasó, no se sabe cuanto se agitó ni cual sonido emitió, solo se sabe que, en un lugar, muy remoto, en los confines de la nada, un pequeño punto empezó a agitarse.

Cada vez que se agitaba, más y más incertidumbre era creada…Eran los principios de las leyes, las probabilidades estaban siendo creadas. Al agitarse cada vez más, empezaba a crear la vibración, con la vibración empezó el calor, con el calor empezó la energía, con el movimiento y la energía se empezó a ver afectado su propio espacio.

La existencia cada vez creaba más y más, espacio, calor, movimiento, energía, masa, cada vez que la probabilidad nacía, ocurría, y el ciclo se repetía una tras otra vez, sin ver fin. La paz estaba triste, sabía que la fragilidad de la perfección y la paz habían sido alterados y no había vuelta atrás. El caos por otro lado, estaba extasiado, sabía que su influencia estaba creando más y más factores y dimensiones que el nunca imaginó.

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Llegados a este punto, la paz y el caos sabían lo que ocurriría. La paz por su lado, en contra del caos, quiso evitar que la existencia continuara desarrollando nuevos fenómenos a su alrededor, sin embargo, el caos jamás lo permitiría, por lo cual, decidió sus palabras con cuidado, palabras las cuales no eran verbales, pero contenían suficiente significado para ser entendidas por el caos…

 

¡Hasta el fin de esta existencia, la paz estará en contra del caos!

 

El caos, tentado por la posición de la paz, aceptó su expresión y, riendo por dentro, a sabiendas de haber conseguido lo que anhelaba, expresó:

 

¡La disputa del principio solo acabará al final, y el final solo llega cuando haya nada!

 

Con ceños fruncidos, ambas influencias se retiraron del plano, dejando que la 'influencia nacida del caos' y el 'intento de calma' de la paz continuara creando y amasando la nueva realidad.

Poco a poco, el punto de existencia mono dimensional logró expandirse y crear un gemelo, una existencia equivalente, un par que no se sumía en la misma posición que él, no solo se había creado una expresión de materia paralela a ello, si no que consigo, el primer plano de dos dimensiones, conteniendo en si una línea formada por dos puntos existenciales.

Este proceso no frenó. Como células y organismos vivos, la incertidumbre, el caos residual y la energía continuaron su formación de la realidad. El espacio ahora era donde residían, el tiempo era solo un tramo de sucesos, uno tras otro. El arriba y el abajo eran la ilusión creada por los nuevos planos dimensionales. El alto, ancho y la profundidad habían sido concebidos gracias a la influencia de la materia en el nuevo espacio.

El ciclo se repitió por eones, sin pausas y de manera infinita, todo iba abarcando espacio y así como la materia inicial, todo contenía las propiedades iniciales. Los cúmulos fueron creados, las galaxias, los cuerpos celestes, la luz y la oscuridad, el cielo y la tierra, el pasado, presente y futuro. Todo iba en rumbo conforme al tiempo y el caos seguían influenciando la realidad…